INGREDIENTES (8 - 10 P)

 

2 Caquis (o Kakis) de la variedad rojo brillante

1 yogur griego

1 medida de yogur de aceite de girasol 

2 medidas de azúcar

3 medidas de harina 

3 huevos

1 sobre de levadura en polvo

pizca de sal

 

 

 

ELABORACIÓN

 

El caqui es mi fruta de otoño favorita y ahora la convierto en bizcocho.

 

Lo ideal sería utilizar un caqui convencional (con la pulpa blanda) y otro de la variedad pérsimon (con pulpa dura). Más abajo te explico la diferencia entre los dos.

 

Empezaremos precalentando el horno a 180º. Para medir la cantidad de harina, azúcar y aceite de oliva, utiliza el envase vacío del yogur. Separa las yemas de las claras, reserva estas últimas, agrega el azúcar y el aceite y remueve bien.

 

El yogur lo vamos a batir con la batidora eléctrica junto con el caqui convencional de pulpa blanday lo incorporamos bien a lo anterior. Mezcla la harina y la levadura y añádela a todo esto pero tamizándolo con un colador grande. Sigue batiendo hasta que todos los ingredientes queden perfectamente incorporados.

 

Las claras las montaremos con las varillas eléctricas y una pizca de sal. Cuando esté montado lo añadimos a la mezcla poco a poco y con movimientos envolventes. Seguidamente unta un molde con mantequilla y espolvorea con harina, en el fondo colocaremos unas siete rodajas de medio centímetro aproximadamente del caqui persimón con pulpa dura, vierte la mezcla con cuidado de no moverse la fruta y hornéalo a 180ºC durante 40-45 minutos. Finalmente deja que se temple y desmóldalo. Al darle la vuelta se verán las rodajas de caqui.

 

Para darle un poco de brillo a la fruta y al bizcocho en general, he preparado un almíbar muy fácil a base de 100 ml de agua y 100 g de azúcar. Ponemos el agua y el azúcar en un cazo a fuego medio, y lo llevamos a ebullición un par de minutos, hasta que el azúcar se haya disuelto por completo. Finalmente con un pincel vamos dando brillo a nuestro bizcocho de caqui.